martes, 22 de octubre de 2013

Tiempo, efímero tiempo...


Tiempo, sutil regalo del cielo,
Tiempo, efímero, distante y reacio a mi camino
Tiempo, agotándose de a pocos.
Pausadas horas de mi existencia,
que pasan ondas, profundas, devastantes;
Quiero ver el mar y su vaivén acompasado,
y sentir la suave brisa de una tarde sin final...
Tiempo, sutil regalo del cielo;
Tiempo, efímero, distante y reacio a mi camino
Reten el paso, detén tu premura,
que mi ser anhela un instante eterno
para llegar a su lado y fundirme en un abrazo.
En un abrazo sin un ayer que marca,
en una abrazo del hoy que siempre espera un mañana;
porque el deseo constante de su sola presencia mata.
Porque vivir es tan sólo una cruel ironía
sin él, sin su mirada, sin su distante sonrisa... 
Tiempo, efímero, distante y reacio a mi camino
reten el paso, detén tu premura
que mi corazón tiembla porque agoto
los minutos, las horas y los días sin verle
Tiempo, sutil regalo del cielo,
Tiempo, efímero, distante y reacio a mi camino
Tiempo, agotándose de a pocos.
Aztiram

domingo, 20 de octubre de 2013

Tu mirada...


Es tu mirada la que me llena de luz los días,
es tu mirada la que enciende mi esperanza y me da vida. 
Es tu mirada la que me ha hecho creer
que aun existe una razón para soñar.

Otra vez...negra noche.

Negra noche no me toques,
 déjame quedarme en este eterno día 
 ¿porque me niegas la luz del sol? 
 Negra noche no me toques
 déjame quedarme para ver su sonrisa
¿porque vuelves renuente a mi esperanza?
 No, no me niegues esta mi alegría,
 el aroma de las flores 
 y la calidez del viento envolviéndome en sus sueños
Que ironía, luchar tanto para perder al final con cobardía
¡No te rindas! suplica mi alma; 
pero mis fuerzas son recuerdo nada más...
y se pierden mis intentos en el desconsuelo, que agonía. 
me he cansado de mostrarme con valía.
No te rindas me grita mi alma;
pero mi voz se apaga
y no queda nada más que silencio. 
negra noche, detén tu paso 
¿que no ves que aumenta el miedo 
por tu presencia repentina?
Luché una vez y otra vez, mas estoy cansada
por hacerte frente cada día 
se que tienes que llegar
pero te ruego, noche, 
detén tu paso raudo solo por un día
un día en el que pueda 
tan siquiera a lo lejos disfrutar de su sonrisa 
quédate, noche con el resto de mis días
cúbreme pronta después de que me hayas dejado
 en un minuto eterno disfrutar del sonido de su voz en la distancia, después de que me haya grabado su mirada en la mía
negra noche no me toques
te lo imploro de rodillas
pero lentamente mi esperanza se hace nada
y  la nada me cubre...
¿Como decirle  a mi alma que mi cuerpo no responde a su suplica?
¿Como le digo a mi cuerpo que obedezca?
Que ironía, luchar tanto 
para perder tan de pronto,
 de manera repentina. 
pasos eternos, otra vez en el mismo camino,
 otra vez estoy de pie delante de ti
pero comienzan a doblarse mis rodillas
clama mi alma no te rindas 
 regálame un milagro providencia no te ensañes 
regálame solo un día...