lunes, 26 de septiembre de 2016

Que más da...

Que más da una noche en el silencio,
que más da...
Me he vuelto una pesada carga para tu liviana sonrisa 
y que más da.
Ya conozco a que suenan los pasos del abandono y
cuando llegan
se acercan lentamente con solicitudes de espacio y tiempo...

Que más da si los días se hacen lentos
aprendí con cada gota de lluvia que el aroma a petricor 
de la tristeza es preferible a quedarse robando sonrisas lejanas.
Que más da si soy un ave solitaria sé volar a contratiempo 
y sé como se siente el rose del viento.

Que más da te iras con el sol de la mañana, dulce brisa
y sé que entonces la negra noche se tornará en mi más cercana amiga.
Pero al fin podre elevar el vuelo taciturno con alas heridas, 
sí con alas heridas, pero el vuelo será mío y tan mío 
que podré al fin mirar a distancia lo anhelado 
y sabre cuanto cuesta renunciar al tal vez, al pudo ser y al de repente. 
Que más da ya se bailar al compás del viento y se llorar también con la lluvia. 
Adiós a la brisa y desde hoy
volare con alas rotas sí, pero el vuelo será mío. 

miércoles, 7 de septiembre de 2016

He vuelto a ser yo....

HE VUELTO A SER YO CON LA MISMA INTENSIDAD.. 
He vuelto a ser yo con la misma intensidad con la que una ola rompe entre las rocas y vuelve a la mar,así de simple, así como es...
He vuelto a mirar el horizonte y a sentirme libre con las alas de mi alma al viento y una sonrisa inigualable; porque al fin he comprendido que  el mañana es inesperado  y a veces extraordinario...
He vuelto a ser yo con la misma intensidad y  a danzar con los pies en la tierra esperando que en cada paso la melodía del tiempo me enseñe a volar... 
Días de Setiembre, despertando de una sueño largo y viendo al sol brillar en todo el esplendor de su belleza, he comenzado a vivir.